Luxemburgo es un país que merece la pena visitar no solo por su cultura y tradiciones, sino también, por tener una gastronomía muy variada, que recibe influencias de los países con los que hace frontera.
Muchos de sus platos típicos se encuentran influenciados por la gastronomía alemana, aunque fácilmente se podría decir que su gastronomía es de estilo francés.
Si piensas viajar a este país, es importante que conozcas algunos datos de interés económico, como por ejemplo cuánto cuesta comer en Luxemburgo, ya que de esta manera podrás hacer el presupuesto tu viaje, y al mismo tiempo, disfrutar de sus delicias gastronómicas. ¡Sigue leyendo!
¿Se puede comer barato en Luxemburgo?
Comer barato en Luxemburgo es posible, pero dependerá mucho de la zona en la que te encuentres y de lo que quieras comer, ya que encontrarás restaurantes de comida rápida con menús a partir de los 16 euros, o si prefieres un menú de McDonalds, podrás encontrarlo desde 9 euros.
Si hablamos del menú del día, te decimos que es una elección perfecta para solucionar tus comidas, ya que es mucho más económica que el resto de los platos a la carta. Aunque es importante destacar, que no se encuentra disponible en todos los restaurantes del país.
Nuestra recomendación, es que si deseas ahorrar unos euros en tu viaje, escojas preparar tus propias comidas, aunque para ello, deberás optar por un alquiler vacacional y no por un hotel convencional.
Precio del menú del día en Luxemburgo
El menú del día en Luxemburgo tiene un precio que parte de 18 euros, mientras que los platos a la carta, suelen partir de 35 euros. Esto quiere decir, que una comida para dos personas a la carta, puede tener un coste de 70 euros, mucho más caro que dos menús del día.
¿Qué incluye el menú del día en Luxemburgo?
El menú del día en Luxemburgo suele incluir una sopa, que va acompañada del pan propuesto por el chef o una ensalada, y para finalizar, incluye un postre.
Por lo general, podrás elegir entre dos opciones de platos o entrantes, aunque dependerá del establecimiento. Y en cuanto al postre, lo normal es tener de dos a tres opciones para escoger.
Si quieres comer barato, te recomendamos optar por platos como hamburguesas, pizzas, sopas o pastas, que los hay prácticamente en todos los restaurantes tanto del centro de la ciudad como en el resto del país.