Saltar al contenido
- Home » Internacional » Europa » Andorra » 7 maneras de (re)descubrir Andorra

7 maneras de (re)descubrir Andorra

Andorra es un país muy curioso en todos los aspectos. Hace años, lo más habitual (especialmente para la gente del norte) era hacer una visita rápida para comprar algunos productos libres de impuestos. No ha tardado mucho en proliferar otro tipo de turismo, gracias a su situación en los Pirineos o las aguas termales del Río Valira.

Como decimos, no es extraño visitar Caldea para relajarnos en su centro termal o buscar cómo practicar esquí en Andorra con Esquiades.com. Pero hoy queremos poner el foco en otro tipo de actividades, quizás menos conocidas por el público. Acompáñanos a ver Andorra desde otra perspectiva.

7 formas de ver Andorra de otra manera

Visitar sus iglesias románicas

Aunque se trate de un pequeño territorio, las iglesias románicas proliferaron en diferentes enclaves de Andorra. Existen hasta 44 templos que podemos visitar, aunque hay algunos que son verdaderamente imprescindibles. La Iglesia de Sant Climent, en Pal, tiene uno de los campanarios más bellos de todo el país.

Por otro lado, la Iglesia de Sant Romà, en Les Bons, forma parte de un Conjunto Histórico de diferentes épocas. Este edificio en concreto data de 1164 y, aunque está algo más deteriorada, es el culmen perfecto para callejear por el pueblo. No podemos dejar de recomendar la Iglesia de Santa Coloma, muy cerca de Andorra la Vella. Su torre circular y la pequeña entrada son visita obligada.

Disfrutar de Naturlandia

Si llegas a Andorra desde la frontera con España, no tardarás en encontrarte un letrero que anuncia este parque de aventuras. Llega hasta Sant Julià de Lòria y podrás pasártelo en grande con tu familia. Tus hijos podrán echar un buen día entre camas elásticas, tirolinas y castillos hinchables.

Pero no creas que se trata únicamente de un parque para niños. Tú podrás realizar actividades de lo más divertidas (algunas incluidas en el precio, otras no): quads, buggies o, la atracción estrella: el Tobotronc. Es como un trineo / tobogán con el que desciendes durante más de 5 kilómetros, con más de 400 metros de desnivel.

Congelarte en el Palau de Gel

Vale, a lo mejor congelarte no es precisamente lo que quieres en unas vacaciones, pero en este caso no podrás parar quieto. En el Palau de Gel de Canillo encontrarás varias actividades relacionadas con el hielo que te harán divertirte a lo grande. El ballon-balai, por ejemplo, es un deporte canadiense que tienes que probar.

Pero, sin duda, lo más divertido es montar en karts sobre hielo y competir contra tus amigos. No hay mucho más que explicar para decirte que no podrás dejar de derrapar y deslizarte, y en cuanto lo controles no vas a querer parar.

Descubrir los Pirineos como nunca

Está claro que si hay algo que ver en Andorra es nieve. Pero esta vez no hablamos de las pistas de esquí como te recomendábamos antes con Esquiades.com, a pesar de lo divertido y atractivo que es para mucha gente

En este caso queremos poner el foco en unas excursiones preparadas para recorrer las montañas en un vehículo oruga. Hasta 14 personas pueden acudir a este paseo tan increíble, que te permite conocer de otra manera la cordillera más alta de España (y de Andorra, claro).

Degustar los platos típicos

Como decíamos antes, muchas personas piensan que un país tan pequeño no tiene tradiciones ni gastronomía propia. Nada más lejos de la realidad, ya que en multitud de lugares puedes pasar a probar su comida típica de montaña.

Desde cervezas artesanales hasta las “bordas (casas de montaña tradicionales que se remodelaron para pasar a ser restaurantes), todo lo podrás encontrar en Andorra. No te vayas de allí son probar algunos platos como la escudella, la carne con setas o el trinxat.

Conocer a fondo sus raíces

Siguiendo con el punto de las tradiciones que nombrábamos, también se puede descubrir la historia y las costumbres del país. El hecho de que sea un coprincipado ya es algo poco común, pero hay mucho más que seguro no conocías y te sorprenderá.

Lo mejor para enterarte de todo es visitar la Casa de la Vall, de 1580, que fue la sede del Consell General hasta hace una década. En cada sala encontrarás explicaciones de lo más interesante. Hay otras tres casas tradicionales que valen mucho la pena: la Casa Cristo, la Casa d’Areny-Plandolit y la Casa Rull.

Recorrer sus pueblos de postal

A lo largo de este artículo habrás podido comprobar que Andorra es mucho más que su capital. A pesar de lo lugares increíbles que tiene Andorra la Vella, el resto de enclaves son simplemente espectaculares. Difícil quedarse con uno solo, pero si tienes poco tiempo no dejes de pasar por Pal, que ya ha aparecido en párrafos anteriores.

Pero hay igualmente otros pueblos que tienen una estética similar y en los que puedes disfrutar simplemente paseando y tomando un café. Si quieres apuntar algunos nombres, toma papel y lápiz: Bixessarri, Anyós, Llorts, Ordino, Fontaneda…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *