Hay quien considera, y no sin razón, que la Sainte-Chapelle es la mayor obra arquitectónica que jamás se ha construido en Occidente. Así que si vas a visitar París, entrar a Sainte Chapelle es parada obligatoria.
Precio de las entradas de Sainte Chapelle
Si quieres visitar Sainte Chapelle, te informamos de que hay disponibles distintos tipos de entradas.
Si buscas entradas baratas te recomendamos que optes por la tarifa normal, ya que por 11,50€ podrás visitar esta capilla.
La entrada de Sainte Chapelle que nosotros te recomendamos es la que incluye también la visita la Conciergerie, la cárcel donde pasó sus últimos días María Antonieta, merece la pena pagar los 18,50€ para ver estos dos monumentos históricos franceses.
¿Quieres entrar gratis a Sainte Chapelle?
Hay varias opciones para entrar gratis a esta capilla. Son las siguientes:
Si eres menor de 18 años, o tienes entre 18 y 25 años y eres ciudadano de la Unión Europea, podrás visitar Sainte Chapelle gratis.
Además la entrada a Sainte Chapelle es gratis los sábados y domingos de las Jornadas Europeas del Patrimonio, es decir, el tercer fin de semana de septiembre y el primer domingo de cada mes.
Horario de visitas de Sainte Chapelle
Esta impresionante capilla está abierta en el siguiente horario:
- Del 2 de enero al 31 de marzo en horario de 9 a 17 horas.
- Del 1 de abril al 30 de septiembre de 9 a 19 horas.
- Del 1 de octubre al 31 de diciembre de 9 a 17 horas.
Por tanto, Sainte Chapelle cierra el 1 de enero, el 1 y el 8 de mayo y el 25 de diciembre únicamente.
Curiosidades sobre Sainte Chapelle de París
Para el hombre medieval era una puerta al cielo, y hoy ningún visitante puede dejar de pensar que ha entrado en un lugar maravilloso cuando se ve envuelto por el resplandor de sus quince fabulosas vidrieras, elevadas quince metros hasta el techo de la bóveda adornado por estrellas.
En las vidrieras de Sainte Chapelle se muestran más de mil escenas religiosas en un caleidoscopio de colores. Fue construida en 1248 para albergar grandes reliquias, como la corona de espinas de Cristo, entre otras. No te pierdas el gran rosetón, sobre todo al atardecer, la vidriera de la Pasión de Cristo, ni las tallas de los apóstoles. Pero, sobre todo, quédate en la capilla y déjate maravillar por la luz. Te aseguramos que no has visto nada similar.