¿Tienes pensado viajar a Miami y no sabes cuánto puedes gastar en algo tan importante como la comida? Quédate con nosotros para descubrir cuánto cuesta comer en Miami y un secreto muy importante: las ventajas de comer el menú del día.
¿Es caro comer en Miami?
El precio de la comida en Miami no es tan alto como muchos podríamos pensar, la verdad es que si hacemos una buena búsqueda de restaurantes con buenos platos y excelentes precios podremos ajustar bastante nuestro presupuesto y comer muy, pero muy bien.
Por ejemplo, si estamos interesados en comer comida rápida, un menú bastante completo en estos tipos de locales puede costarnos entre 7$ y 15$.
En pocas palabras, todo dependerá realmente de las decisiones que tomes y los lugares que visites para tus desayunos, almuerzos o cenas.
¿Cuánto cuesta el menú del día en Miami?
El menú del día en Miami puede tener diferentes precios según -cómo hemos comentado previamente- que restaurante elijas. Por ejemplo, un menú para una persona en una zona importante o turística de la ciudad puede tener precio de unos 20$ incluyendo la bebida.
Por otro lado, también podemos encontrar en otras zonas de la ciudad de menor importancia turística restaurantes que ofrezcan menús con precios que pueden rondar los 15$ por persona.
¿Qué incluye el menú del día en Miami?
Una de las primeras cosas que es importante mencionar sobre el menú del día en Miami es que en la mayor parte de los restaurantes y establecimientos de comida viene incluido en el precio una bebida. No es tan habitual que incluyan el postre en el precio del menú, si quieres un postre, deberás pagar un extra para obtenerlo.
Miami es una ciudad con una influencia latina y caribeña importante, por lo tanto, muchos de los platos que encontrarás pueden ser de este estilo.
El menú del día en Miami incluye: una bebida, un primer plato que puede ser una ensalada ligera, pero de muy buen sabor y un plato fuerte que dependerá del lugar, del día y quizás también de lo que desees comer. Es muy común ver platos con chuleta de cerdo, carne de res o pollo, acompañados de patatas, arroz, ensalada, entre otras opciones de guarnición.